Si eres un corredor con una cierta experiencia haciendo carreras de running, es probable que hayas tenido días en los que todo parecía salir mal. Tal vez llegaste tarde y no te dio tiempo a calentar bien o tu desayuno te jugó una mala pasada durante la carrera. Estos son sólo algunos de los factores que pueden arruinar tu día de carrera. A continuación, te presento 6 consejos para que puedes evitar estos problemas y otros más que pueden surgirte y poder tener un día de éxito en tu carrera.
CONTROLA TU ALIMENTACIÓN
La alimentación es uno de los factores más importantes que debes cuidar antes de una carrera. Es importante comer alimentos que te proporcionen la energía necesaria para correr sin sentirte pesado o evitar tener problemas estomacales. Debes comer sobre todo alimentos ricos en carbohidratos y evitar comer alimentos que sepas que no te sientan bien y además evitar también los alimentos fritos o muy grasosos.
Cada corredor es diferente, por lo que es importante que encuentres la alimentación que funcione mejor para ti. Lo mejor que puedes hacer es probar los alimentos en entrenamientos que sean similares a la carrera, ¡NUNCA pruebes algo nuevo el día de la carrera! No sabes cómo te va a sentar y puede arruinarte la carrera.
Otro aspecto muy importante esa la hidratación, asegúrate de estar bien hidratado con agua y, sobre todo si es un día caluroso, hidrátate también con bebida isotónica.
DESCANSA LO SUFICIENTE
El descanso es una parte importante de cualquier plan de entrenamiento, pero es especialmente importante antes de una carrera. Es importante que te asegures de dormir lo suficiente la noche anterior a la carrera. Trata de irte a dormir pronto e intentar dormir unas 8 horas. Si tienes problemas para dormir o estás nervioso, trata de relajarte haciendo alguna actividad tranquila como leer un libro, escuchar música relajante o darte una ducha caliente o ver una película para distraerte un poco y estar más relajado y dormir mejor.
PREPARA TODO LO QUE NECESITES PARA LA CARRERA CON ANTELACIÓN
No hay nada más estresante que llegar a la carrera y darte cuenta de que te olvidaste algo importante.
Asegúrate de preparar todo lo que necesitas para la carrera el día de antes. Esto incluye tu ropa de competición, las zapatillas con las que vas a correr, lo que vayas a comer antes y durante si tomas geles, barritas y la bebida isotónica y agua, tu documentación personal y cualquier otra cosa que quieras llevarte a la carrera. Lo que te recomiendo es que te hagas una lista de todo lo que te llevas a las carreras y esa lista ya te servirá para todas las carreras y así te aseguras de que no se te olvida nada.
Si lo preparas todo el día anterior tendrás tiempo para verificar que te lo has preparado todo y no tendrás que preocuparte de prepararte nada más el mismo día de la carrera, además el día anterior lo podrás preparar todo sin prisa y con calma, ya que el día de la carrera estarás más nervioso y con prisas.
HAZ UN CALENTAMIENTO ADECUADO
Antes de cualquier carrera es importante realizar un calentamiento adecuado. El calentamiento te ayuda a preparar a tu cuerpo para la carrera y puede ayudarte a evitar lesiones.
Un buen calentamiento consiste en hacer primero movilidad articular de todo el cuerpo, un trote suave después de unos 10 o 15 minutos, estiramientos dinámicos, técnica de carrera y unos 2 o 3 progresivos.
A continuación, te dejo un vídeo con una rutina de calentamiento para antes de correr.
ESTABLECE UN RITMO Y ESTRATEGIA DE CARRERA ADECUADOS
Suele pasar que el día de la carrera estamos más emocionados y empezamos demasiado rápido. Sin embargo, esto puede ser contraproducente y puede agotar tu energía rápidamente. En cambio, si estableces un ritmo objetivo de carrera adecuado desde el principio y tratas de mantenerlo durante toda la carrera verás como te va mejor y tendrás mejores sensaciones desde el principio y hasta el final de la carrera. Esto te ayudará a conservar tu energía y evitar agotarte demasiado pronto. Si sientes que te queda un extra de energía al final de la carrera, aprovecha para aumentar tu ritmo hasta el final y terminar fuerte, hará que se te quede mejor sabor de boca que si llegas demasiado fatigado y habiendo perdido el ritmo que tenías pensado llevar. Si llegas con muchas fuerzas a la meta también te servirá para saber que en la próxima carrera puedes marcarte un ritmo objetivo un poco más rápido y hacer así mejor tiempo en la carrera.
MANTÉN UNA ACTITUD POSITIVA
Por último, es importante mantener una actitud positiva durante la carrera. Hay momentos en los que es más fácil desanimarse, ya sea porque nos encontramos cansados demasiado pronto o no podamos seguir el ritmo que nos habíamos marcado como objetivo. Pero hay que seguir manteniendo una actitud positiva para ayudarte a superar esos momentos difíciles y seguir adelante, ya que si no el sufrimiento será mayor. Trata de enfocarte en los aspectos positivos de la carrera, como el paisaje, el ánimo de los espectadores, pensar en todo el entrenamiento que has hecho para llegar hasta ahí y al menos poder intentarlo.
Si tienes una actitud positiva es probable que ese momento difícil o bache durante la carrera puedas superarlo y llegar a conseguir tu objetivo, pero si por el contrario tenemos una actitud más negativa ante esos momentos, lo que vamos a conseguir es estar peor y no poder superarlo o incluso llegar a retirarnos de la carrera para la que nos habíamos estado preparando durante tiempo.
En resumen, para evitar arruinar el día de tu carrera, es importante cuidar tu alimentación, descansar lo suficiente, preparar todo lo necesario con antelación, hacer un calentamiento adecuado, establecer un ritmo y estrategia de carrera adecuados y mantener una actitud positiva durante toda la carrera.
Siguiendo estos consejos, podrás tener un día de carrera de éxito y disfrutar de todo lo que la experiencia de correr te ofrece. Recuerda que correr no se trata sólo de la carrera en sí, sino también la preparación previa y la actitud que traigas contigo.
¡Mucho ánimo para tu próxima carrera!